Las licencias Creative Commons son textos legales que permiten al autor de una obra original otorgar permisos al público para compartir y usar su creación bajo los términos y condiciones que el propio autor elija.
Una Licencia Creative commons no reemplaza a los tradicionales derechos de autor, sino que se basa en ellos para permitir que el autor en vez de elegir que sus obras tengan todos los derechos reservados pasen a tener “algunos derechos reservados”. Así, por tanto, el control es mayor.
Detrás de este tipo de instrumento de protección de nuestras creaciones está Creative Commons. Se trata de una Organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es la promoción y el intercambio de cultura.
¿Cómo funcionan las licencias Creative Commons?
Las licencias Creative Commons funciona igual que las licencias de los derechos de autor y, por tanto, tienen vigencia en todo el mundo. Además, tiene la misma duración que la propiedad intelectual, ya que están desarrolladas a partir de estas.
Hay que señalar que, con una Licencia Creative Commons los derechos de una obra se autorizan, en ningún momento se ceden. De esta manera, el creador se reserva el derecho de uso comercial de su obra y obtener así beneficio directo o indirecto.
Mediante este tipo de licencias podemos compartir públicamente todo tipo de contenidos exceptuando software y hardware. Y de lo que compartamos, debemos de elegir el tipo de licencia para cada uno de sus elementos: texto, imágenes y música.
Además, cualquier tipo de Licencia Creative Commons prohíbe el uso de diferentes tecnologías o imposiciones de términos legales que impidan que se pueda hacer lo que se especifica. En el caso de no cumplir con los términos detallados, se acaba automáticamente el uso de esta licencia.
En definitiva, los contenidos que colgamos en medios online deberían ser respetados de la misma manera que las obras offline. Por tanto, sobre todo en el caso de las marcas, deberían encontrar maneras para que los contenidos de sus redes estén protegidos.
Te recomendamos que antes de utilizar cualquier contenido colgado en la red te asegures que está libre de derechos de autor y que puedes utilizarlo. Si no es así, deberás ponerte en contacto con el autor para conseguir su autorización.
Recuerda, vulnerar los derechos de autor en redes sociales puede ser sinónimo de robar.