Esta semana vamos a empezar una serie de artículos donde vamos a ver esos inventos patentados que cambiaron completamente nuestras vidas. Algunos ni nos hemos parado a pensar en ellos porque son parte de nuestra vida cotidiana, sin embargo, si piensas que pasaría si no existieran es cuando pensamos lo imprescindibles que son.
Lo curioso es que alrededor de estos descubrimientos siempre hay algo curioso o paradójico y eso es en lo que nos vamos a centrar. Esta semana vamos a hablar sobre la bombilla de Edison.
¿Sabías que el invento de la bombilla incandescente no es de Edison? El auténtico inventor fue Warren de la Rue en 1940, pero aunque consiguiera emitir luz y calor, no pudo mantener esa energía porque siempre se quemaba el filamento. Más de treinta años después, Henry Woodward y Matthew Evans patentaron la idea de Warren con mejoras y cuatro años más tarde Edison les compró la patente y fue el primero que la comercializó y se hizo famoso por ello. ¿qué te parece esta historia?